jueves, 9 de octubre de 2014

El hombre que ya no quiere morir. Mas en concreto de ébola.


Cuatro intentos de suicidio con pastillas, mezclas imposibles y nada. La química no funciona con mi organismo.

De un tiempo a esta parte y gracias a mi psicóloga he cambiado siguiendo sus consejos, y siempre de la mano de G, estoy aprendiendo a quererme y a valorarme pero sobre todo me han hecho entender que el enfermo, el discapacitado, el que necesita ayudas para muchas cosas soy yo. Y lo mas importante es el hecho de que en mi estado lo último que necesito es estrés. De modo que he puesto distancia con personas tóxicas que me hacían mal. Ahora me preocupo por mí, vivo sereno y en paz conmigo mismo. Veo regularmente a G y a Lucas que son lo que mas quiero y lo mas preciado que tengo. He logrado un todavía precario equilibrio emocional con altibajos pero suficiente para hacerme abrir los ojos. Es como levantarse de noche en una habitación desconocida y encender la luz.

También mi ayudante domiciliaría peruana me da mucho sin ella saberlo, aunque yo se lo digo siempre.

En unos días tengo que estar en el Carlos III pero no voy a ir. G, que es la mejor doctora del mundo me lo ha desaconsejado. Mañana llamo y anulo la cita. Me hubiera gustado poner una foto suya junto a esta mía que ya publiqué en otro blog, pero no quiere. Se que no le gusta salir. A Lucas ya lo conocéis, no obstante ni he podido ni he querido resistirme.


Lo mas curioso es que si esto del ébola hubiera o hubiese ocurrido unos meses atrás durante los tiempos oscuros, habría pedido un bis a bis con la enfermera. Ya me entienden, un simple beso con lengua y adiós muy buenas. Fin.
Pero el cuento sigue, no acaba aquí. Y me alegro, sobre todo por G.

14 comentarios:

  1. Me alegra mucho saber que tomas una nueva aptitud ¡dale un beso de mi parte a tu psicóloga! y me gusta esta foto tuya en la penumbra.
    El tema del ébola es indignante, una vergüenza y un peligro espantoso que me pone los pelos de punta porque no sé si van a saber resolverlo.
    Un besito.

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  2. Me alegro de verte aunque sea en la penumbra. Me gusta tu nueva actitud, la muerte no hay que buscarla, ella viene sóla cunato menos lo esperas.

    Todavía tienes mucho que dar y nucho que recibir, cuando permaneces aquí es porque aún no se ha concluido tu función en la tierra.

    Una buena decisión eso de alejarse de las personas tóxicas, ellas son contraproducentes, hay que buscar esas personas medicinas que ven la vida con optimismo y contagian su alegría.

    Buenas noches.....me voy a cenar.

    Besos

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  3. Ya sabes mi opinión, Ripley. Tanto de tu amor por la vida, que lo tienes y mucho, como el asunto del ébola. Indignante. ¿Qué pretendían demostrar? Si no hubiesen sido curas ¿los traerían también?...
    Apunto estas preguntas en mi saloncito también.
    Claro que el cuento sigue, la vida sigue...

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  4. Pues es un gran paso, me alegro mucho de tu actitud positiva y de lucha a la vez, ya ves no estas solo y tienes una doctora que te aconseja bien, con lo cual sigue sus buenos consejos y te deseo que tu vida sea lo mejor posible.
    Un abrazo

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  5. Con ese auto retrato has conseguido mostrar tu silueta a contraluz perfectamente.
    No debe ser agradable tener que ir a ese hospital en estos momentos, aunque creo que están alarmando demasiado.
    Un abrazo.

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  6. Hay que querer moderados imposibles o posibles variados, pero querer morir...como si no fuéramos a morir por no quererlo, quita, quita...deja que siga la película y veamos que pasa con esa silueta de Humphrey Bogart, y sobre todo, a ver si de una maldita vez aparece la rubia.

    Un fuerte abrazo, amigo.

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  7. Buen autorretrato jugando con la luz de la ventana y la sombra de la habitación. En cuanto a lo del Carlos III, bueno, hay que agarrarse a la vida con unas y dientes porque al fin y al cabo lo único que merece ser vivido es la vida misma.

    Un abrazo,

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  8. Bueno veo que por fin te das cuenta de que hay luz al final del túnel. Me alegro un montón.

    Un abrazo.

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  9. Me alegro de tu nueva actitud, es algo que te honra.
    Un abrazo y p'alante.

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  10. Sigo viendo tu silueta misteriosa. Me gusta mucho.

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  11. Los momentos malos hay que aparcarlos y revisarlos desde la distancia, no como a las personas tóxicas. A esas hay que apartarlas lo más rápido y bruscamente que se pueda. Con Lucas y esa persona que te apoyan y en los que te apoyas, y con alguno más que hay seguro, habrá mejores momentos y los no tan buenos tampoco serán tan malos.
    Un abrazo, Adolfo.

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  12. Me gusta mucho este post, Ripley, lo que dices claro y luminoso como el retrato de Lucas y lo que se adivina como en el tuyo :)

    Un beso

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  13. Decídete ya a poner una entrada nueva y no la borres... venga...

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  14. Eso, Ripley. Haz caso a Juan Carlos.
    Un abrazo. Se te echa de menos...

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